miércoles, diciembre 03, 2008

Lección 14

Los Diez
Mandamientos

Parte 10



“Yo pienso que me es mayor gozo ganar una sola alma para Cristo que montañas de plata y oro para mí mismo.”
Matthew Henry

Comentario: Este es el último Mandamiento en nuestro estudio. Después de completar esta lección, quizás deberías repasar todos los diez para asegurarte de que entiendes la naturaleza espiritual de cada uno. Recuerda, estos Mandamientos son el espejo que enseñará a las personas su pecado en su luz verdadera. Estúdielas hasta que los tengas memorizados. Serán armas invaluables mientras hablas con los perdidos.



Preguntas y Objeciones

“He roto los Diez Mandamientos, pero hago buenas cosas por la gente”

Muchas personas hacen cosas similares. Pueden robar de su empleador o estafar en sus impuestos, después dan a una caridad o pasan el día de Acción de Gracias ayudando en una cocina para los desamparados. Ellos piensan que están balanceando las balanzas: ellos han hecho lo malo, pero ahora están haciendo lo bueno. Sin embargo, la Biblia revela la motivación de un pecador culpable es una de culpabilidad (ver Hebreos 9:14). Ellos están intentando sobornar al Juez del Universo. El Juez en este caso no será corrompido. Él tiene que castigar a todos los pecadores. Buenas obras no pueden ganar misericordia; viene puramente por la gracia de Dios. Él va a despedir nuestra iniquidad solamente en la base de nuestra fe en Jesús.


En esta lección veremos el Décimo Mandamiento: “No codiciarás… cosa alguna de tu prójimo” (Éxodo 20:17).

Codiciar es el pecado más sutil, quizás, de todos. Se ve menor cuando es comparado al adulterio, robo, o abuso sexual. Sin embargo, antes que un hombre robe, él codicia. Antes de que abuse sexualmente o comete adulterio, él codicia. Codiciar es la chispa que enciende el fusible del pecado. Es un pecado que está cerca de todo ser humano. Pocos niños están contentos con diez pedazos de dulce cuando al niño que está a su lado se le da once. La codicia tiene como compañera de cama a la envidia, avaricia, y lujuria. Era este pecado silencioso que encontró un lugar en el corazón del Rey David, rico y bendecido como era. Su ojo codicioso fue hacia la mujer de su prójimo, y abrió la puerta a una multitud de pecados.

¿Quién de nosotros estamos sin culpa y podemos decir que nunca hemos celosamente deseado algo que le pertenecía a otra persona? ¿Sea que deseamos la casa, el carro, el ingreso, o el estilo de vida de otro, nuestra codicia revela una falta de gratitud por lo que Dios ya nos ha dado? Por eso es que las Escrituras nos amonestan a ser “sin avaricia, contentos con lo tenéis ahora” (Hebreos 13:5). Aprende a orar como el salmista, “Inclina mi corazón a tus testimonios, y no a la avaricia. Aparta mis ojos que no vean la vanidad…” (Salmos 119:36,37.).

Matthew Henry dijo, “el Décimo Mandamiento corta a la raíz; No codiciarás. Todos los otros prohíben todo deseo que ha a causar una herida a nuestro prójimo; esto prohíbe todo deseo equivocado de tener lo que nos va a satisfacer a nosotros mismos.”

Mira a esta cita increíble de Martín Lutero. Nos recuerda de la función y el poder de la Ley para revelar nuestros “pecados” escondidos:

“Mientras una persona no es un homicida, adúltero, ladrón, él puede jurar que es
justo. ¿Cómo Dios va a humillar a tal persona sino por la Ley? La Ley es el
martillo de muerte, el estruendo del infierno y el estruendo de la ira de Dios para
hacer caer a los orgullosos y descarados hipócritas. Cuando la Ley fue instituida
en el Monte Sinai fue acompañada por relámpagos… por tormentas, por el sonido
de trompetas, para romper en pedazos el monstruo llamado justicia propia.
Mientras la persona piense que está en lo correcto ella va a estar
incomprensiblemente orgullosa y presunciosa. Ella va a odiar a Dios, a pesar de
su gracia y misericordia, e ignorar las promesas de Cristo. El evangelio del libre
perdón de pecados a través de Cristo nunca apelará al que es justo en sí mismo.
Este monstruo de justicia propia, esta bestia de dura cerviz, necesita un hacha. Y
eso es lo que la Ley es, una gran hacha. De acuerdo al correcto uso de la Ley es
de amenazar hasta que la consciencia esté paralizada de terror.”

Es importante advertir a aquellos que son culpables de este pecado “inofensivo” que de acuerdo a la Escritura, “ningún…avaro, que es idolatra tiene herencia en el reino de Cristo y de Dios” (Efesios 5:3,5). En codiciar, la persona no solamente quebranta el Décimo, pero también el Primero y el Segundo Mandamiento. Cuando él ama a las cosas materiales más de lo que ama a Dios, él está poniendo su afecto en el regalo, en vez de al Dador. ¿Qué padre no le dolería si su amado hijo ama más a sus juguetes que al padre que le dio los juguetes? Un niño debe amar a su padre primero y sobre todo. Él debe amar al dador más que al regalo, y debe estar contento con lo que tiene.



Preguntas

1. ¿Qué quiere decir el codiciar?



2. ¿Por qué es el pecado silencioso de la codicia tan dañino?



3. ¿Qué es lo opuesto a la codicia? (Ver Hebreos 13:5)



4. ¿Qué podemos aprender del Salmo 23 acerca de este pecado?



5. ¿Hay áreas en que eres culpable de este pecado?



6. ¿Por qué crees que la codicia es tan frecuente?






Progreso del Predicador

Phil Osofo: “Entiendo que tú eres la persona religiosa que ha estado dando esta literatura.”
Cristiano: “Sí, señor.”
Phil Osofo: “¿No crees en estas cosas, verdad?”
Cristiano: “Claro.”
Phil Osofo: “Ha estado probado que la Biblia está llena de errores.”
Cristiano: “Nombre uno.”
Phil Osofo: “No puedo pensar en ninguno en este momento, pero es bien conocido que los manuscritos han sido cambiados a través de las edades.”
Cristiano: “No lo han hecho. Los Pergaminos del Mar Muerto probaron eso.”
Phil Osofo: “No importa. Prefiero poner mi fe en la ciencia probada que en un libro antiguo lleno de mitos.”
Cristiano: “¿Sabía que la Biblia está llena de verdades científicas y médicas que estaban escritas miles de años antes que la ciencia les descubriera?”
Phil Osofo: “No lo sabía.”
Cristiano: “Que estén en la Biblia prueba que es sobrenatural en origen. No sólo eso, pero la Biblia está llena de profecías que son 100% exactas.”
Phil Osofo: “¿Qué tal (quita la palabra “de”) Nostradamus y sus profecías?”
Cristiano: “Nostradamus leía la Biblia en secreto, robó sus profecías y las hizo suyas. Cualquiera que es ignorante de las profecías bíblicas se va a impresionar con las ‘profecías’ de Nostradamus.”
Phil Osofo: “Mi filosofía de la vida es hacer a otros lo que yo quisiera que ellos hicieran conmigo.”
Cristiano: “Esas son las palabras de Jesús. ¿Has hecho eso?”
Phil Osofo: “¿Qué?”
Cristiano: “¿Tratar a otros como quisieras que te traten a ti?”
Phil Osofo: “Más o menos.”
Cristiano: “¿Alguna vez has mentido a alguien?”
Phil Osofo: “Sí.”
Cristiano: “¿Alguna vez has robado algo de alguien?”
Phil Osofo: “Sí.”
Cristiano: “Has mentido y robado de otros, y por lo tanto no has tratado a otras personas como quisieras que te traten a ti. No has vivido al estandarte de la filosofía de tu vida. ¿Sabes como se llama eso?”
Phil Osofo: “¿Qué?”
Cristiano: “Hipocresía. ¿Si Dios te juzgara por los Diez Mandamientos en el Día del Juicio – teniendo en mente que eres un ladrón mentiroso quien es culpable de hipocresía, y ningún hipócrita entrará al cielo – piensas que serás inocente o culpable?”



Plumas para Flechas

Hace años, la policía del Sur de California llevo a cabo una operación muy interesante. Ellos tenían una lista de miles de criminales quienes de alguna manera habían evitado ir a la cárcel. En vez de poner en riesgo sus vidas al tratar de arrestar cada uno de ellos, ellos enviaron a todos los criminales una carta diciéndoles que habían ganado una cantidad grande de dinero en un sorteo.

La policía puso letreros y carteleras en un edificio, y puso globos y hasta un payaso en la parte de afuera para crear un ambiente festivo para dar la bienvenida a los “ganadores.” Mientras cada criminal entraba al edificio, el escuchaba música y otros sonidos de celebración. Él después fue dirigido a un cuarto donde (quita la palabra “el”) sonreía mientras daba las manos saludando a la gente. La expresión de la cara de gozo cambió a incredulidad mientras que a cada uno se le decía, “¡Felicidades, acaba de ganar un tiempo en prisión!” Docenas de criminales caminaron por las puertas principales, fueron arrestados y sacados por las puertas de atrás.

Era interesante notar que muchos de estos transgresores de la Ley admitieron mientras eran detenidos, “¡Yo pensé que era una operación!” pero no se podían evitar ir por su avaricia. Su amor al dinero les cegó (quita la palabra “a”) la razón, No seas como ellos. Piensa profundamente acerca de la cuestión de la eternidad, preguntándote, “¿Qué aprovechara al hombre si ganare todo el mundo y perdiere su alma?”



Palabras de Confort

Hace algunos años me sentí mal por uno de mis vecinos. El pobre hombre gastó una gran cantidad de tiempo y dinero derramando concreto, hora tras hora, noche tras noche, semana tras semana, para una larga entrada de carros enfrente de su nueva casa. El producto terminado se veía excelente – hasta que llovió. Charcos se formaron cada dos o tres yardas. Entonces él tomó su martillo pesado y gastó hora tras hora, noche tras noche, semana tras semana, haciéndole pedazos, los cuales quita la palabra “el”) los puso en su camión de remolque e hizo muchos viajes al basurero. Entonces él comenzó de nuevo, compró más cemento, y gastó hora tras hora, noche tras noche, semana tras semana laboriosamente derramando concreto. Por muchos días escuchamos el sonido del mezclador de concreto, mezclando concreto mientras nuestro vecino trataba de rectificar su equivocación.

Finalmente, el trabajo fue completado. Esta entrada de carros se veía mejor que la primera. Uno podría decir que un profesional lo hubiera hecho…hasta que llovió y revelo los charcos un poco más pequeños que la primera vez. Se mudó.



Ultimas Palabras

Anne Boleyn (1507-1536), la segunda esposa de Henry VIII:

“Oh Dios, ten piedad de mi alma. Oh Dios, ten piedad de mí misma.”



Versículo para Memorizar

No améis al mundo, ni las cosas que están en el mundo. Si alguno ama al mundo, el amor del Padre no está en él.
1 Juan 2:15

sábado, noviembre 22, 2008

Lección 13

Los Diez
Mandamientos

Parte 9



“Yo no creo que algún hombre puede predicar el evangelio quien no predica la Ley.”
Charles Spurgeon

Comentario: ¿Es una mentira blanca una mentira? ¿Es una media verdad solamente la mitad de una mentira? Si tú dices una mentira por una “buena razón,” ¿es aún un pecado? ¿Qué nos cualifica como un mentiroso? ¿Por los estandartes de quién seremos juzgados?



Preguntas y Objeciones

“¿Qué si alguien dice que nunca ha mentido, robado, deseado sexualmente, blasfemado – si rechaza el haber alguna vez pecado?”

Pregúntale a la persona que si a cumplido con el Primer Mandamiento. ¿Ha amado a Dios siempre sobre todas las cosas – con todo su corazón, alma, mente, y fuerzas (Marcos 12:30)? Si dice que lo ha hecho, suavemente dile, “La Biblia dice que ‘no hay nadie que busque a Dios’ (Romanos 3:11). Nadie (excepto Jesucristo) ha cumplido el Primero de los Diez Mandamientos. Uno de ustedes está mintiendo – tú o Dios – y la Biblia dice que es imposible que Dios mienta” (Hebreos 6:18; Tito 1:2).


E
n esta lección veremos al Noveno Mandamiento: “No hablarás contra tu prójimo falso testimonio.”(Éxodos 20:16).

Es común cuando mencionamos este Mandamiento el escuchar la respuesta, “Me quieres decir que si una señora te pregunta si piensas que es fea, ¿tienes que decirle la verdad – que lo es?” Déjale a la persona saber que hay una gran diferencia entre discreción (sabia restricción propia en el habla) y mentir (una falsa declaración intencionada para engañar), y que Dios sabe la diferencia.

¿Debe un cristiano decir una mentira alguna vez? Hay momentos cuando nos encontramos en posiciones difíciles al darnos cuenta que decir la verdad puede tener repercusiones extremas. Por ejemplo, eres preguntado por un Nazi si estás escondiendo un judío en tu casa. ¿Debes decirle que hay dos debajo de tu cama? Hacer esto resultará en su muerte segura. Tu opción es mentir y salvar vidas, o decir la verdad y ser un cómplice al homicidio. Otro ejemplo es poner “turista” en vez de “contrabandista de Biblias” en tu visa a China, o no decir a la policía en un país perseguido los nombres de otros miembros de la iglesia perseguida. Quizás la respuesta es que es la motivación lo que importa. Sin embargo, la cuestión depende de la consciencia de cada individuo.

La Biblia dice que Dios no miente, y el Noveno Mandamiento lo deja claro que decir falso testimonio en contra de nuestro prójimo es malo. Decir falso testimonio para hacer daño a otro, o evitar las consecuencias de nuestras propia conducta mala, nunca es aceptable ante un Dios santo quien sabe nuestra motivación.

El diccionario define una mentira como un falso testimonio deliberadamente presentada como que fuera verdad; una falsedad; algo intencionado a engañar para dar una impresión equivocada. Le gente muchas veces dirán que sólo han dicho “mentiras blancas.” Pero no hay diferencia entre una mentira blanca, una media verdad, o una exageración. Todas son mentiras ante los ojos de Dios. ¿Cuántos homicidios tiene que cometer una persona para ser un homicida? Sólo uno. En la misma manera, si han dicho sólo una mentira, no importando qué color o tamaño, eso les hace un mentiroso.

El Noveno Mandamiento requiere la verdad, toda la verdad, y solamente la verdad. Dios es un Dios de verdad y Su Ley demanda absolutamente honestidad del corazón. Pero aún el corazón humano es engañoso sobre todas las cosas. Ha sido bien dicho que el tomar la senda fácil es lo que hace a ríos y a hombres torcidos. Mira a (quita la letra “a”) esta cita interesante:
…20,000 estudiantes de secundaria fueron encuestados por el Instituto de Ética Josephson – una organización sin fines de lucro en Marina del Rey, Calif.,
dedicado a la educación del carácter. Noventa y dos por ciento de los estudiantes admitieron haber mentido a sus padres en el año previo, y 73 por ciento
se caracterizaron como “mentirosos en serie,” queriendo decir que ellos decían
mentiras semanalmente. A pesar de sus admisiones, 91 por ciento de todos los encuestados dijeron que ellos estaban “satisfechos con su propia ética y carácter.” (Reader’s Digest, Noviembre 1999)

El camino de las mentiras es frecuentemente un camino fácil, pero dirige al infierno. La Biblia advierte que todos los mentirosos tendrán su parte en el Lago de Fuego (Apocalipsis 21:8). ¡Qué pensamiento más miedoso! La gente quizás no piense que el engaño no es un pecado serio, pero Dios sí. Debe romper nuestro corazón sólo pensar el destino de los impíos.



Preguntas

1. ¿Cuál es la definición del diccionario de una mentira?



2. ¿Cuál es la diferencia entre una mentira y la discreción?



3. ¿Piensas que está bien que un cristiano mienta alguna vez para proteger a alguien? ¿Por qué si o por qué no?



4. ¿Cuál es la diferencia entre una mentira blanca, una media verdad, y una exageración?


5. ¿Cuántas mentiras debe una persona decir para ser un mentiroso?



6. ¿Qué pasará con todos los mentirosos?






Progreso del Predicador

E. N. Gaño: “Permiso. Yo te escuché hablando con esa persona, y pienso que no tienes el derecho de juzgarle a él (quita la palabra “el). La Biblia dice, “No juzguéis, y no seréis juzgados.’”
Cristiano: “No estaba juzgándole a (quita la palabra “el”). El me dijo que era un mentiroso, y le creí.”
E. N. Gaño: “Bien, aún pienso que no tienes derecho de decirle lo que le dijiste. Le avergonzaste. Yo soy un cristiano y lo que hiciste estaba mal.”
Cristiano: “Sólo estoy diciendo lo que la Biblia dice. Advierte que todos los mentirosos tendrán su parte en el Lago de Fuego. ¿Acaso no te preocupa su salvación?
E. N. Gaño: “Sí. Pero no me gustó la forma como le hablaste quita la palabra “a” y “él.”
Cristiano: “¿Qué le hubieras dicho?
E. N. Gaño: “Que Dios le ama.”
Cristiano: “¿Te puedo hacer una pregunta?”
E. N. Gaño: “Claro.”
Cristiano: “¿Has cumplido los Diez Mandamientos?”
E. N. Gaño: “Sí.”
Cristiano: “¿Nunca has dicho una mentira, media verdad, o una exageración?”
E. N. Gaño: “Nunca.”
Cristiano: “¿Cómo puedes decir que eres una buena persona cuando la Biblia dice que no hay bueno – ni uno?”
E. N. Gaño: “Ahora me estás juzgando a mí. Yo pienso que tú eres un *&%$ idiota y no debes estar forzando tus creencias en la cara de la gente.”
Cristiano: “No estoy haciendo eso. Estoy simplemente advirtiendo a las personas que Dios juzgará al mundo en justicia, y que necesitan el Salvador.”
E. N. Gaño: “Mientras que esta gente crean en Dios y vivan una vida buena, estarán okay.”
Cristiano: “No lo estarán. Tienen que arrepentirse y confiar en Jesucristo.”
E. N. Gaño: “Eso es sólo tu creencia. ¿Qué importa que haya dicho algunas mentiras en mi vida? No hice mal a nadie. Dios no me va a tirar al infierno sólo por decir una mentira blanca.”
Cristiano: “E. N., mírame a los ojos. Si tus ojos se encuentran con los míos en el Día del Juicio, y aún estás en tus pecados…yo estoy libre de tu sangre. Yo no me he cohibido de decirte la verdad. Necesitas confesar y apartarte de tus pecados. No es suficiente solamente creer en Dios.”




Plumas para Flechas

Dos mujeres del Sur de California estaban por cruzar la frontera Mexicana para volver a los Estados Unidos cuando ellas vieron lo que parecía un animal pequeño muy enfermo en la zanja al lado del carro. Mientras lo examinaban en la obscuridad de la noche, ellas vieron que era un pequeño Chihuahua. Ellas decidieron llevárselo a la casa con ellas y cuidarle hasta que se recupere. Sin embargo, porque tenían miedo de estar rompiendo alguna ley, le pusieron en el baúl del carro, y manejaron cruzando la frontera. Una vez en los Estados Unidos, le sacaron al animal y le cuidaron hasta llegar a la casa.

Una de las mujeres estaba tan por el perro enfermo que ella le puso en la cama con ella, y le tocó varias veces durante la noche para hacerle sentir, preocupada por el pobre animalito para asegurarle (quita la palabra “de”) que ella estaba allí.

El perro estaba tan enfermo en la mañana, que ella decidió llevárselo al veterinario. Allí es donde le dijeron que el animal no era un pequeño perro enfermo. Era una rata mexicana de agua, y se estaba muriendo de rabia.

El mundo, en la oscuridad de su ignorancia, piensa que le pecado es un perrito con el cual jugar. Es la luz de la Ley de Dios que alumbra al pecador a la verdad de que está en cama con una terrible rata.

Estuvimos una vez “engañados, sirviendo diversos deseos y placeres,” pero ahora, si nos hemos verdaderamente convertido, nuestros ojos han sido abiertos. Vemos el pecado como el veneno endulzado que es.


Palabras de Confort

En Houston, Texas, la policía salió con sus sirenas persiguiendo a tres ladrones de bancos, que se habían metido al tráfico de una carretera. Sin el conocimiento de la policía, dos ladrones que también habían terminado un trabajo recientemente estaban en la carretera, y salieron volando en altas velocidades equivocadamente pensando que la ley les estaba persiguiendo a ellos. La policía inmediatamente sí les persiguió…y los detuvieron después de que estos ladrones chocaran su carro llenos de pánico.


Ultimas Palabras

Isaac Watts escritor de himnos:

“Es una gran misericordia que no tengo nada de temor y miedo de la muerte. Yo puedo, si le place a Dios, descansar mi cabeza y morir sin terror esta tarde.”


Versículo para Memorizar

El testigo falso no quedará sin castigo, Y el que habla mentiras no escapará.
Proverbios 19:5

martes, noviembre 18, 2008

Lecciónes 1 - 4


Aquí tenemos las primeras cuatro lecciones. Vamos a separar las lecciones por partes. La segunda parte casi termina con la parte 10 de la lección que viene.

Estas lecciones las pueden imprimir y repartirlas!!! Para DIOS es la gloria y la honra.

sábado, noviembre 15, 2008

Lección 12

Los Diez
Mandamientos

Parte 8



“La gracia no significa nada para una persona que no sabe que es pecadora y que esta pecaminosidad quiere decir que ella está separada de Dios y condenada. Es, por lo tanto, inútil predicar gracia hasta que las demandas imposibles de la Ley y de la realidad de culpabilidad ante Dios son predicados.”
John MacArthur

Comentario: Este Mandamiento verdaderamente sirve para despertar la consciencia. Es maravillosamente efectivo en alertar a individuos a la seria condición de su corazón. Acuérdate, un pequeño robo es un robo.



Preguntas y Objeciones

“¿Acaso no hay circunstancias cuando el violar la Ley de Dios es justificado?”

La esposa de un hombre se está muriendo. Ella necesita medicina que solamente está disponible en una tienda, y la tienda está cerrada. Están muy lejos de un hospital, y el hombre no tiene suficiente dinero para comprar la medicina aun si la tienda estuviera abierta. Entonces se mete esa noche, se roba la medicina (y no toca nada más), y salva la vida de su mujer. ¿Es esto moralmente incorrecto? ¿Es esto un pecado?

La Biblia dice, “No tienen en poco al ladrón si hurta para saciar su apetito cuando tiene hambre; pero si es sorprendido pagara siete veces; entregará todo el haber de su casa.” (Proverbios 6:30-31).

Si un hombre roba para salvar la vida de su esposa, el “roba.” El entonces es culpable de romper la ley de los hombres y de Dios. Sin embargo, cualquier juez razonable tomaría en cuenta la motivación de su transgresión y ser misericordioso. Obviamente, Dios hará lo mismo en el Día del Juicio con aquellos que se han encontrado en tal situación. Dios hará lo correcto. Sin embargo, si tu cavas un poco mas a la motivación de la persona quien está preguntando si romper la Ley de Dios es alguna vez justificable, vas a encontrar que ni él ni un amado de él está en una situación de vida o muerte; él simplemente está creando escenarios en su imaginación para tratar de justificar el amor a su pecado.


En esta lección veremos al Octavo Mandamiento: “No hurtarás.”(Éxodos 20:15).
La mayoría de gente no piensa que Dios considera el robo ser robo hasta que el valor de lo que es robado le impresione a Él. Sin embargo, si yo abro tu cartera y cojo sólo un dólar, yo soy un ladrón, y la Biblia dice que los ladrones no entran en el reino de Dios. ¿Qué sería lo suficientemente valioso como para robarlo y perder tu alma? Jesús preguntó, “Porque ¿Qué aprovechara al hombre, si ganare todo el mundo, y perdiere su alma?” (Mateo 16:26).

Es un testimonio triste a la maldad del corazón humano cuando el mundo honra a una persona honesta. Alguien encuentra una cartera llena de dinero y lo devuelve al dueño – y eso hace noticias nacionales. Es raro cuando un ser humano hace lo que debe hacer. Robar viene fácil para nosotros porque nuestro padre espiritual es un ladrón. Él vino para robar, matar, y destruir, y su voluntad nosotros felizmente hacemos…y nos encanta. Como un niño usa una lanza de anguila conectada a un pedazo de soga enganchándolo a las manzanas del patio del vecino y las hala a través de seto a su propiedad. Nosotros teníamos manzanas en casa, pero las manzanas robadas saben más dulces.

No nos damos cuenta como el pecado se pone en cuclillas a la puerta del corazón humano. Muchos nunca considerarían robar hasta que la tentación viene. Toma por ejemplo la situación de Mayo 14, 1993, en Chicago, cuando $600,000 se cayo de un camión armado a la carretera. Conductores llenos de pánico pararon sus vehículos a un alto y llenaron sus bolsillos de billetes. Motociclistas fueron vistos llenando sus cascos con billetes, y rápidamente yéndose a la distancia. Dos paramédicos dieron a la policía $120,000. Ellos devolvieron el dinero sólo porque sospechaban que era dinero de droga y por lo tanto “marcado.” Alrededor de $450,000 aún está perdido.

Pecadores frecuentemente cavarán profundo en el ámbito de la fantasía para tratar de justificar el robo. Ellos dirán, “¿Me estás diciendo que si un hombre roba un pan para dar de comer a sus hijos que se están muriendo del hambre, que Dios llama eso robo?” La respuesta es sí. Es robo y la Biblia dice que él debe hacer restitución por su crimen. Si un hombre tiene hambre, él debe mendigar antes de robar. Un pecador frecuentemente admitirá robar pero dirán que sólo era un caramelo cuando era joven. O dirá que ha robado una vez, pero desde entonces se ha reformado. Se le debe decir que el tiempo no perdona el pecado, y que Dios aún ve los pecados de ayer como si hubieran sido cometidos hoy. Para su boca usando la Ley (Romanos 3:19). Enséñale que la única forma de escapar las terribles consecuencias del pecado es la Puerta del Salvador. Deja que el huracán de la ira de Dios sople lejos de él las escasas hojas de justicia propia. Haz que nombre su transgresión por nombre – que es un ladrón. Entonces apunta a (y hazle leer) 1 Corintios 6:9,10.

Charles Finney dijo, “Esta Ley, entonces, debe ser puesta en orden en toda su majestad en contra del egoísmo y la enemistad del pecador. Todos los hombres saben que han pecado, pero no todos están convencidos de culpa y de la mala paga del pecado. Pero sin esto ellos no pueden entender o apreciar el método de la salvación en el evangelio. Fuera con esta predicación de leche-y-agua del amor de Cristo que no tiene santidad y discriminación moral en ella. Fuera con la predicación del amor de Dios que no está enojado con los pecadores todos los días.”



Preguntas

1. ¿Por qué es el valor de lo robado irrelevante?



2. ¿Qué es lo que revela acerca de la naturaleza humana una noticia de que un hombre devolvió una billetera perdida?



3. ¿Está mal que un hombre robe cuando tiene hambre?



4. ¿Cómo reaccionarias si vieras $600,000 revoloteando en una carretera?



5. ¿Qué no te dejaría robarte el dinero?



6. ¿Por qué no es suficiente para un ladrón que reforme sus caminos?






Progreso del Predicador

Cristiano: “¿Cómo estás?”
Rob O. Bancos: “Bien. ¿Y tú?”
Cristiano: “Bien. ¿Conoces de alguna buena iglesia por esta área?”
Rob O. Bancos: “Yo no se. No he ido a la iglesia por años.”
Cristiano: “¿Has tenido una crianza cristiana?”
Rob O. Bancos: “Sí. Fui a la Escuela Dominical, Pero la dejé cuando crecí.”
Cristiano: “Por si acaso, mi nombre es Cristiano. ¿Cuál es el tuyo?”
Rob O. Bancos: “Rob O. Bancos.”
Cristiano: “Gusto conocerte. ¿Te consideras ser una buena persona…quiero decir, has cumplido con los Diez Mandamientos?”
Rob O. Bancos: “Más o menos.”
Cristiano: “¿Alguna vez has dicho una mentira?”
Rob O. Bancos: “Sí.”
Cristiano: “¿Qué te llamarías al hacer eso?”
Rob O. Bancos: “Un mentiroso.”
Cristiano: “¿Alguna vez has robado algo?”
Rob O. Bancos: “Me estas haciendo sentir culpable.”
Cristiano: “¿En serio? ¿Cuál Mandamiento te hace sentir culpable – No dirás falso testimonio?”
Rob O. Bancos: “No.”
Cristiano: “¿No robarás?”
Rob O. Bancos: “Ya no quiero hablar más de esto.”
Cristiano: “Perdóname. No quise ofenderte. ¿En qué trabajas?”
Rob O. Bancos: “Yo…um…trabajo en un banco. Ya me tengo que ir…”



Palabras de Confort

Una vez hice un asiento de 15 pies de largo para el interior de un bus que había comprado. Estaba emocionado que por fin, algo estaba yendo bien. Entonces dirigí mis energías al asiento del otro lado del bus. Me determiné que no iba a equivocarme, entonces hice todo idéntico al primero. Hice una replica exacta, sabiendo que no me podía equivocar si lo hacia así. Era sólo cuando lo levanté para darle vuelta para ponerle en contra de la otra pared que me di cuenta de mi error. Hubo un clunk! Al golpear la pared del bus. El asiento era 15 pies de largo, pero el bus solo 10 pies de ancho – no podía darle vuelta al asiento para ponerle en la otra pared.

Yo amaba ese bus. Pusimos versos bíblicos alrededor del bus y pinté un cuadro grande de un hombre en un ataúd en la parte de atrás del bus. Amontonado alrededor de él estaban bultos de dinero, y debajo estaban estas palabras, “Porque ¿Qué aprovechará al hombre si ganare todo el mundo, y perdiere su alma?” Por alguna razón conductores casi no se acercaban al bus.

Era un bus grande. Era tan grande, que mientras yo guiaba el volante Sue trabajaba los pedales. Un día estaba conduciendo por la ciudad y encontré que era muy grande para virar en una esquina. Muy cuidadosamente vi el retrovisor y retrocedí. Entonces escuche un sonido que nunca olvidare: un alto ne-ne-ne-ne-ne-ne-ne! Seguido por un rrrrraaaassssppppooooon. Revise mi retrovisor otra vez – nada allí. Conduje hacia al frente. Otra vez escuché el misterioso rrrrraaaassssppppooooon, entonces yo me estacione y revise lo que yo pensé que estaba halando algo bajo el bus. De repente, hubo unos golpes en la puerta. Yo abrí y vi un joven con una cara pálida. Él había parado detrás del bus en un carro muy pequeño, cuando un ataúd con “Porque ¿Qué aprovechara al hombre si ganare todo el mundo, y perdiere su alma?” comenzó a ir hacia él. El pitó la bocina de su carro ne-ne-ne-ne-ne-ne-ne! mientras el bus raspó sobre su carro – tomando el cadáver, el ataúd, y las Escrituras hasta su parabrisas. Pobre hombre.



Ultimas Palabras

Sócrates (470-309 B.C.), filósofo griego de quien Platón estaba muy orgulloso:

“Toda la sabiduría del mundo es solamente una pequeña balsa cuando salgamos de esta tierra. Si solamente hubiera un fundamento más firme en el cual ir, quizás una palabra divina.”



Versículo para Memorizar

Porque ¿qué aprovechará al hombre si ganare todo el mundo, y perdiere su alma? ¿O qué recompensa dará el hombre por su alma?
Marcos 8:36, 37

sábado, noviembre 08, 2008

2 Corintios 12: 9

La Chequera del Banco de la Fe - 8 de Noviembre

"Bástate mi gracia; porque mi poder se perfecciona en la debilidad." 2 Corintios 12: 9.

Nuestra debilidad debe ser valorada en la medida que abre paso a la fortaleza divina. No podríamos haber conocido nunca el poder de la gracia si no hubiéramos experimentado la debilidad de la naturaleza. Bendito sea el Señor por el aguijón en la carne y el mensajero de Satanás, ya que nos encaminan a la fortaleza de Dios.

Esta es una preciosa palabra que brota del propio labio del Señor. Ha llevado a este escritor a reír de gozo. ¡La gracia de Dios es suficiente para mí! Estoy seguro que es así. ¿Acaso no basta el cielo para el pájaro, y no basta el océano para el pez? El Todosuficiente es suficiente para mi mayor necesidad. Aquel que es suficiente para la tierra y el cielo, es en verdad capaz de satisfacer el caso de un pobre gusano como yo.

Apoyémonos, entonces, en nuestro Dios y en Su gracia. Si no quitara nuestro dolor nos daría la capacidad de aguantarlo. Su fortaleza será derramada sobre nosotros hasta que el gusano remonte las montañas; y quien es un don nadie saldrá victorioso sobre todos los encumbrados y poderosos; pues aun si fuésemos mil veces más fuertes de lo que somos, eso sería igual a nada delante del enemigo; y aunque pudiésemos ser más débiles de lo que somos, lo cual sería muy difícil, podríamos hacerlo todo por medio de Cristo.


miércoles, noviembre 05, 2008

Lección 11

Los Diez
Mandamientos

Parte 7



“En mi predicación de la Palabra, tome especial nota de esta cosa, que el Señor me dirigió a comenzar con pecadores donde Su palabra comienza; esto es, condenar toda carne, y abrir y alegar que la maldición de Dios, por la Ley, pertenece y toma de todo hombre que entra en el mundo, por el pecado.”
John Bunyan

Comentario: Aunque Jesús dio una advertencia muy seria acerca del quebrantamiento del Séptimo Mandamiento, es quizás el que es roto con más entusiasmo y emoción.



Preguntas y Objeciones

“Dios me hizo homosexual, entonces El no quiere que cambie.”

Los homosexuales argumentan que ellos no hicieron una decisión consciente de ser de esa forma, entonces debe ser natural. Ellos nacen así – así como todos nosotros nacemos con una naturaleza pecaminosa y con deseos pecaminosos (Efesios 2:1-3). Diles que es natural para ellos, y para todos nosotros, de ser tentados para hacer las cosas que Dios dice son equivocadas. En la misma manera, los abusadores de niños, adúlteros, alcohólicos, drogadictos, etc., no toman una decisión consciente de “escoger” ese estilo de vida destructivo; ellos simplemente se dan a sus deseos pecaminosos. Sin embargo, aunque el pecado es natural para el no creyente, eso no quiere decir que Dios quiere que se queden así. Dios puede liberarles de su naturaleza pecaminosa (Romanos 7:23-8:2), darles nuevos deseos (Efesios 4:22-24), y ayudarles a soportar la tentación (1Corintios 10:13).


En esta lección veremos al Séptimo Mandamiento: “No cometerás adulterio.”(Éxodos 20:14).

La Biblia dice que el Mesías magnificaría la Ley y que la haría honorable (Isaías 42:21). Los Fariseos deshonraron la Ley al decir que Dios requería solamente una externa demostración de piedad. Sin embargo, Jesús enseñó que Dios juzga nuestra vida de pensamiento. Él dijo, “Oísteis que fue dicho: No cometerás adulterio. Pero yo os digo que cualquiera que mira a una mujer para codiciarla ya adulteró con ella en su corazón” (Mateo 5:27, 28). Al hacer esto toco la niña del ojo de la humanidad. Los hombres viven y mueren por lujuria. Para ellos, es el placer más grande de la vida, y preferirían ser condenados a dejarla ir. Si la salvación fuera por obra humana, nadie sería salvo. El trabajo evangelístico estaría sin esperanza. Pero gracias a Dios que Él nos da arrepentimiento dirigiéndonos al conocimiento de la verdad (2 Timoteo 2:25). Es Dios que nos trae a nuestros sentidos y nos enseña el fin de nuestra transgresión. Este Mandamiento es quizás el más poderoso de todos los potentes cañones de Dios y por lo tanto debe ser usado frecuentemente para despertar a pecadores a su situación grave.

Lujuria es especialmente peligrosa porque rara vez se encuentra sola. Sus compañeros de cama son fornicación, adulterio, perversión, abuso sexual, y hasta homicidio. Arde en el corazón del hombre, y como reflujo ácido, forja su camino por la carne en una ola que todo lo consume con una mente propia. Lujuria causó que Herodes matara a Juan el Bautista, el hombre más grande nacido de mujer. No quiere la mitad de tu reino, quiere tu cabeza en un plato. Trae consigo el pecado, y el pecado cuando es concebido trae muerte. Proverbios 6:32 nos advierte, “Mas el que comete adulterio es falto de entendimiento; Corrompe su alma el que tal hace.”

El regalo del sexo fue dado por Dios para la procreación y placer. Las Escrituras dicen que la única vez que el hombre y la mujer deben abstenerse del gozo del sexo es cuando están orando y ayunando; de otra forma, se están abriendo para ser tentados (1 Corintios 7:5). La Biblia también dice que el hombre debe estar capturado (embelesado) siempre con el amor de ella (Proverbios 5:18-20). La única estipulación es que es su esposa con la que él debe estar embelesado – no con la vecina.

Los hombres frecuentemente se engañarán a ellos mismos creyendo que los Diez Mandamientos condenan sólo el adulterio, dejándoles libres de tener sexo fuera del matrimonio. Sin embargo, la Ley condena todos los actos de sexo ilegales. Primera de Timoteo 1:8-10 nos dice que la Ley fue hecha para los fornicarios. Gálatas 5:19 lista el adulterio y la fornicación como los primeros en la lista de las obras de la carne.

Aquellos que dejan el matrimonio pensando que pueden disfrutar del sexo afuera de los limites de (quité la L) la institución se arriesgan a contraer el SIDA y numerosas enfermedades transmitidas sexualmente – algunas de las cuales no son curables. Es interesante notar que un hombre y una mujer pueden tener relaciones sexuales diez mil veces dentro del matrimonio y nunca ni una vez están en riesgo de contraer una enfermedad sexualmente transmitida.

Uno que comete adulterio (del griego Porneia, “penetración sexual ilícita”) toma lo que puede ser legalmente su regalo de Dios, y lo corrompe. El es como un niño, que una noche se roba un billete nuevo de veinte dólares de la cartera de su padre, sin darse cuenta que la intención de su padre era dárselo como regalo en la mañana.

El fornicador no sólo peca contra Dios e incurre la ira de la justicia divina, pero peca en contra de su consciencia, y su propio cuerpo (1 Corintios 6:18). Fornicadores no heredarán el Reino de Dios (1 Corintios 6:9). Las Escrituras nos advierten a “abstenernos de los deseos de la carne que pelean en contra el alma” (1 Pedro 2:11).

No te desanimes si estás batallando en contra de la lujuria. Si estás luchando, entonces por lo menos estás peleando. Si no tienes problemas con ella, entonces has dado tu corazón a demonios y te halarán al infierno. Éstas son palabras miedosas – pero son necesarias para despertarnos a lo que está en juego.

¿Llevarías pornografía a la iglesia y la verías durante la adoración? Es como hacerlo, por que Dios esta igualmente presente en tu dormitorio como lo está en el edificio de la iglesia. Si eres dado a la pornografía, date cuenta que quizás no eres salvo. Examínate para asegurarte que Cristo este viviendo en tí (2 Corintios 13:5). Ve Romanos 6:11-22; 8:1-14; Efesios 5:3-8.

Date cuenta que cuando te das a la pornografía, estás cometiendo adulterio (Mateo 5:27-28). Despiértate a la seriedad de tu pecado. Jesús dijo que sería mejor que fueras ciego he ir al cielo que tus ojos te causen pecar y terminar en el infierno (Mateo 5:29). Aquellos que profesan ser cristianos y babosean sobre material pornográfico evidentemente no tienen temor de Dios (Proverbios 16:6). Cultiva el temor de Dios leyendo Proverbios 2:1-5. Piensa a dónde le llevó la lujuria al Rey David. Él se abrió a muchos otros pecados, incluyendo homicidio, y trajo miseria y vergüenza al nombre de su familia. Lee Salmos 51 y hazla tu oración.

Memorízate Santiago 1:14, 15 y 1 Corintios 10:13. Sigue el ejemplo de Jesús (Mateo 4:3-11) y cita la Palabra de Dios cuando eres tentado (ver Efesios 6:12-20).

No hagas provisión para tu carne (Romanos 13:14; 1 Pedro 2:11). Desásete de todo acceso a material pornográfico – el Internet, literatura impresa, TV, videos, y películas. Para ya de alimentar el fuego. En cambio, guarda tu corazón con toda diligencia (Proverbios 4:23). No permitas que el ámbito demoníaco tenga acceso a tu vida de pensamiento. Si te das a ti mismo a esto, te volverás su esclavo (Romanos 6:16).

Lee la Biblia diariamente, sin falta. Al someterte a Dios, el diablo huirá (Santiago 4:7-8). La próxima vez que venga la tentación, haz cincuenta flexiones, y después cincuenta abdominales. Si aùn te estás quemando, repite el proceso (ver 1 Corintios 9:27).

Anímate porque aunque los pecadores se sacudan de tus palabras cuando hables con ellos acerca de la lujuria, se encontrarán que es más difícil sacudirse de la convicción del Espíritu Santo. Planta la semilla de la verdad en la tierra del corazón. Diles lo que Jesús dijo acerca de este pecado, y después ora que el Espíritu Santo haga la palabra crecer en su corazón.



Preguntas

1. Cómo hizo el Mesías de (quita la esta palabra) la Ley mas “honorable”?



2. Cuáles son algunos de los pecados que acompañan a la lujuria?



3. Qué quiere la lujuria de tí? (ver Juan 10:10; y Santiago 1:14, 15.)



4. Cómo responderías a una persona que dice que los Diez Mandamientos no condenan el sexo afuera del matrimonio?



5. Por qué no debes desanimarte si tienes un problema con la lujuria?



6. Qué dice la Biblia a aquellos que consideran ver pornografía como una actividad que no hace daño?



7. Qué podemos aprender de Proverbios 2:1-5?




Progreso del Predicador

Cristiano: “Ey, Larry. Que bueno verte otra vez.”
Larry Lujuria: “Ey, Cristiano. ¿Qué tal?”
Cristiano: “El Cielo. ¿Crees que vas a ir allá?”
Larry Lujuria: “Claro. Soy tan bueno como cualquier Cristiano.”
Cristiano: “Eso no fue el caso la última vez que hablamos. ¿Aún estás deseando a las mujeres?”
Larry Lujuria: “Absolutamente. Me encanta. Lo que tu ves como lujuria, yo lo veo como placer. No hay nada malo en ver a una mujer y decir, ‘Ella es bonita.’”
Cristiano: “Eso es correcto. No hay nada malo con eso. Pero Dios dice que si hay algo malo cuando la deseamos sexualmente. El lo llama adulterio.”
Larry Lujuria: “¿Cómo sabes la diferencia?”
Cristiano: “Tu consciencia. Te dirá cuando cambia de ‘ver’ a ‘desear sexualmente,’ si tienes mente para escuchar.”
Larry Lujuria: “Bueno, como dije, si que me da placer.”
Cristiano: “Sólo porque da placer no quiere decir que está bien. Abuso sexual puede dar placer. También un emocionante robo de banco. Jesús dijo que si tu ojo te causa pecar, debes sacártelo en vez de dejar que el pecado te lleve al infierno.”
Larry Lujuria: “No creo que Dios me enviará al infierno sólo por ver a una mujer.”
Cristiano: “El no lo hará, pero El sí te enviará al infierno por cometer adulterio en el corazón. Aprecio que me escucharas. Me dejas saber si quieres hablar más, Larry.”



Plumas para flechas

Tanta de la miseria del mundo es infligida por las personas mismas: SIDA, alcoholismo, obesidad, culpabilidad, drogadicción, adición a la nicotina y sus enfermedades relacionadas, etc. Mira a (quita esta letra) la repercusión del adulterio revelada en esta carta no firmada: “Hace once años, me fui de un matrimonio de doce años. Mi esposa era una buena persona, pero por un largo tiempo ella estaba bajo mucho estrés. En vez de ayudarle, comencé una aventura con su mejor amiga. Fue un desastre. Esto es a lo que renuncie: 1) ver a mi hija crecer; 2) el respeto de muchos amigos de muchos años; 3) el placer de vivir como una familia; 4) una esposa que era leal, apreciativa y me trataba de hacer feliz. Esto es lo que recibí: 1) dos hijastros que me trataban como basura; 2) una mujer que no sabía hacer nada para la cena sino solamente reservaciones; 3) una esposa cuyo interés en mí era solamente cuánto dinero podía ella obtener; 4) una esposa que hacía comentarios de menosprecio de mi familia y arruinó mis amistades existentes; 5) finalmente, lo mejor que recibí fue un amargo y caro divorcio.”



Palabras de Confort

Una señora llamada Peggy entró al vestíbulo de nuestro ministerio y preguntó si podía estacionar su taxi de 18-ruedas en frente de nuestro edificio. Le dije que estaba bien, y después le di uno de nuestros tratados de colección de Elvis. Ella vio la foto y dijo, “Se parece a mi primer marido.” Le pregunté cuántos había tenido. Ella dijo que ahora estaba con su cuarto marido.
Me refrene de decir “…y aquél con el que estás ahora no es tu marido,” y en cambio le di un penny con los Diez Mandamientos impresionados en él. Le dije lo que era, y le pregunté, “¿Piensas que has mantenido los Diez mandamientos?”Cuando ella admitió que había mentido y robado, suavemente le dije, “Por tu misma admisión, eres una mentirosa ladrona. Si Dios te juzga por los Diez Mandamientos en el Día del Juicio, ¿serás inocente o culpable?” Ella dijo que sería culpable y terminaría en el infierno. Le dije que no era la voluntad de Dios que ella vaya allá, y le pregunte si sabía lo que Dios había hecho para que ella no vaya al infierno. Abrió sus ojos y sinceramente dijo, “El dio a Su olvidado Hijo.” (nota: juego de palabras entre dio y olvidado). La mayoría de América sabe Juan 3:16, aunque no lo digan muy bien.



Ultimas Palabras

Zuniger era un Profesor de Medicina en Basel quien, aunque reconocido por su talento, era un creyente de un simple corazón que vivía a la luz de la eternidad. Sus últimas palabras fueron:

“Me regocijo, sí, mi espíritu adentro salta de gozo, que ahora el tiempo ha finalmente llegado cuando veré al glorioso Dios cara a cara; quien yo por fe he deseado, y por quien mi alma a bramado.”



Versículo para Memorizar

Oísteis que fue dicho: No cometerás adulterio. Pero yo os digo que cualquiera que mira a una mujer para codiciarla, ya adulteró con ella en su corazón.
Mateo 5:27-28

sábado, noviembre 01, 2008

Lección 10

Los Diez
Mandamientos

Parte 6



“Si es que no le das muerte al pecado, tendrás pecado hasta la muerte. No hay alternativa. Si tú no mueres al pecado, morirás por el pecado. Si no matas el pecado, el pecado te matará a ti.”
Charles Spurgeon

Comentario: Todos nosotros podemos estar de acuerdo en que el homicidio es un pecado muy serio. La mayoría de nosotros pensamos que estamos a salvo de este Mandamiento. Pero desde el punto de vista de Dios, tú y yo no somos tan inocentes. Esta es una lección aclaradora.



Preguntas y Objeciones

“Si el aborto no fuera legal, tendríamos todas esas pobres muchachas escondiéndose para ir a esos carniceros en callejones escondidos. Por lo menos de esta forma ellas tendrán consejería.”

Tienes razón. Piensa en todos esos pobres homicidas quienes están restringidos a estar escondiéndose y a matar en secreto. ¡Debemos legalizar el homicidio también! Entonces pueden matar en un ambiente bonito, limpio y seguro. Serán protegidos de ser salpicados de sangre que puede contener enfermedades, y podemos ofrecerles consejería para que ellos no tengan trauma de post-homicidio de las decisiones que han tomado.


En esta lección veremos el Sexto Mandamiento, y qué es lo que quiere decir a la luz de la revelación del Nuevo Testamento: “No Matarás.” (Éxodos 20:13).

En la luz opaca de su ignorancia, el mundo mira al Sexto Mandamiento y se proclama “no culpable.” Sin embargo, Dios requiere verdad en lo íntimo (Salmos 51:6). En otras palabras, Él ve la vida de pensamientos – la intención, la motivación interna de cada ser humano. Si la ley civil puede probar que estás planeando asesinar al Presidente, puedes ser procesado y severamente castigado. La ley, sin embargo, está limitada en su búsqueda de evidencia – no puede ver lo que el hombre piensa. No es así con el ojo de nuestro Creador que todo lo ve. Su Ley examina el corazón, y Él ve “malos pensamientos.” El sólo hecho de pensar odio es transgredir el Sexto Mandamiento.

Jesús dijo, “Ustedes han oído que se dijo a sus antepasados: ‘No mates, y todo el que mate quedará sujeto al juicio del tribunal.’ Pero yo les digo que todo el que se enoje con su hermano, quedará sujeto al juicio del tribunal” (Mateo 5:21-22). La Biblia añade que si es que odiamos a alguien, somos homicidas (1 Juan 3:15). Hay muchos que les gustaría matar, pero se refrenan por temor del castigo. Dios les cuenta como culpables de homicidio.

Aún si es que no tenemos pensamientos de matar físicamente a alguien que odiamos, hay otro sentido en el cual deseamos su muerte. Juan 8:44 dice del diablo que “él fue un homicida desde el principio.” Mientras que el diablo no iba alrededor matando a hombres y mujeres, al tentar a Adán y Eva él sí trajo la muerte espiritual para toda la humanidad por el pecado (ver Romanos 5:12). Si odiamos a alguien, el último pensamiento en nuestra mente sería (sustituí la palabra De por EL) el compartir el evangelio con ellos por nuestra preocupación por su salvación. En ese sentido, nosotros también nos volvemos homicidas, deseando la muerte eterna de la persona, al no darles palabras de vida.

Algunos estados tienen leyes que declaran a una persona culpable sólo por estar presente y no impedir un crimen. En la misma manera, Dios nos declara culpable de homicidio si sólo nos paramos y no hacemos nada para impedir la muerte eterna de alguien. Su sangre está en nuestras manos (ver Ezequiel 3:18).

Sesenta personas son asesinadas todos los días en los Estados Unidos (estadísticas del FBI revelan que un promedio de unos 20,000 homicidios por año). Los Homicidios se han vuelto tan comunes que casi no merecen mención en los noticieros.

Hace algún tiempo atrás, Thomas Lyndon Jr. De Rocky Point, Long Island, confesó el homicidio de una mujer durante un asalto. El admitió que (quité la palabra EL) sostuvo la punta de una navaja de casería de cuatro pulgadas a la garganta de ella, y después “la metió un poco mas profundo” después de que ella despertó y comenzó a luchar. Él dijo que después que Lea Greene paro de moverse, “yo conté su palpitaciones por curiosidad de ver cuánto tiempo tomaría para morir…yo sabía exactamente lo que estaba haciendo…sabía que era contra la ley…me sentí poderoso – invencible, o algo, ¿tú sabes?” Qué verdaderas son las palabras de Charles Spurgeon, el Príncipe de los Predicadores: “Mira a la naturaleza humana caída. Whitefield sabía decir que era mitad bestia y mitad diablo. Yo pregunto que si los dos, la bestia y el diablo, no son difamados cuando son comparados con el hombre cuando éste es dejado a su propia cuenta.”

En nuestro día el aborto es una ocurrencia común. Muchas personas tratan de convencerse a ellos mismos que el niño aún no nacido no es nada más que “un montón de tejido.” Haciéndolo aceptable para ser destruido. Pero a los 21 días de gestación, el corazón del niño late, y a los 40 días las ondas del cerebro pueden ser medidas. Si por nuestro criterio médico la vida termina cuando no hay palpitaciones del corazón o actividad en el cerebro, entonces seguramente podemos decir que por su presencia la vida ha comenzado. La Biblia dice claramente que tomar la vida de alguien aún no nacido es homicidio: “porque no me mató en el vientre y mi madre hubiera sido mi sepulcro” (Jeremías 20:17), y Dios juró (quité la palabra DE) castigar aquellos que “abrieron a las mujeres…que estaban encinta” (Amos 1:13). Dios, el Creador de la vida, nos mandó a, “No derramar sangre inocente” (Jeremías 7:6).

Algunos igualan a la pena capital con homicidio, y citan la orden de Jesús de amar a nuestros enemigos (Mateo 5:44) como evidencia que Él apoyó la pena capital. Sin embargo, sólo porque tenemos amor por un enemigo no nos da el derecho de dejarle escapar la justicia por homicidio. La Biblia dice: “Sométase toda persona a las autoridades superiores; porque no hay autoridad sino de parte de Dios, y las que hay, por Dios han sido establecidas. De modo que quien se opone a la autoridad, a lo establecido por Dios se resiste, y los que resisten acarrean condenación para sí mismos…Pero si haces lo malo, teme; porque no en vano lleva la espada, pues es servidor de Dios, vengador para castigar al que hace lo malo” (Romanos 13:1-4).

La Biblia dice que todo aquel que deliberadamente toma una vida debe perder su propia vida: “Cualquiera que diere muerte a alguno, por dicho de testigos morirá el homicida; mas un sólo testigo no hará fe contra una persona para que muera. Y no tomareis precio por la vida del homicida, porque está condenado a muerte, indefectiblemente morirá” (Números 35:30-31). Génesis 9:6 dice: “El que derramare sangre de hombre, por el hombre su sangre será derramada; porque a imagen de Dios es hecho el hombre.” Esto enseña el valor que Dios pone a la vida humana. La seriedad de un crimen está revelada por el castigo que es dado al criminal. Es interesante notar que cuando el bombardero de la Ciudad de Oklahoma Timothy McVeigh pidió la pena de muerte, 250 familiares de las víctimas que él mató pidieron ver su ejecución. Su deseo de ver la justicia hecha testifica del valor que ellos ponen al ser amado que perdieron. A pesar de reclamaciones al contrario, la pena capital sí desalienta el delito. La persona ejecutada no lo volverá a hacer otra vez.

Aún, hay lideres cristianos respetados que sus consciencias no les deja apoyar la pena capital, por la preocupación de que gente inocente puedan caerse por las grietas del sistema judicial. Por eso tanto esfuerzo extensivo es gastado para asegurarse de la culpa del acusado en un caso de pena capital. Sin embargo, a pesar de las imperfecciones de las leyes civiles, se nos dice que estemos sujetos a las autoridades gobernantes.

Fue Dios quien instigó la pena de muerte en el principio. El Juez del Universo pronuncio la sentencia de muerte (quité la palabra EN) a toda la humanidad cuando Él dijo, “El alma que pecare, esa morirá” (Ezequiel 18:20).



Preguntas

1. Por qué está la ley civil limitada en lo que tiene que ver con el procesamiento de un criminal?



2. La mayoría de la gente dirá que no es culpable de violar el Sexto Mandamiento. Cómo puedes explicar la perspectiva de Dios?



3. Por qué Dios considera el odio ser igual al homicidio?



4. Hay alguna persona que no te agrada al punto de no querer ver a esa persona en el cielo? Crees que Dios te considera un homicida por esto?



5. Piensas que Dios ve el aborto como homicidio? Por qué sí o por qué no?



6. La Biblia hace equivaler la pena capital con el homicidio? Por qué sí o por qué no?






Progreso del Predicador

Ben Gay: “Hey, Cristiano, soy homosexual, y la ciencia ha probado que he nacido así.”
Cristiano: “Verdad. Yo nací con tendencias homosexuales.”
Ben Gay: “¿Huh?”
Cristiano: “Yo también nací con tendencias a mentir, robar, cometer adulterio y fornicar. Se llama ‘pecado’ y está en todos nosotros.”
Ben Gay: “¿Entonces estás diciendo que yo voy a ir al infierno sólo porque soy homosexual?”
Cristiano: “Ni siquiera he mencionado el infierno. ¿Dónde piensas que irás cuando mueras?”
Ben Gay: “Al Cielo.”
Cristiano: “¿Por qué?”
Ben Gay: “Porque soy una buena persona.”
Cristiano: “¿Quieres hacer un examen pequeño para ver si lo eres?”
Ben Gay: “Okay.”
Cristiano: “¿Alguna vez has mentido? ¿Robado? ¿Usado el nombre de Dios en vano?” La Biblia nos dice que la Ley Moral fue hecha para los homosexuales (ver 1 Timoteo 1:8-10). Si tú usas la Ley cuando estás evangelizando, ni siquiera tendrás que mencionar su “tendencia sexual,” y por lo tanto, acusado de “odio.” La Ley enseñará al homosexual que está condenado a pesar de su preferencia sexual. Cuando él encuentre un lugar de arrepentimiento genuino y fe en Jesús, Dios le quitará su espíritu inmundo y le dará un corazón nuevo con nuevos deseos.



Palabras de Confort

En Lakewood,, California, un hombre quien envió cuatro pelotas de golf a un lago en el club de golf local decidió que él no era un jugador de golf dotado. Él estaba tan molesto con sus esfuerzos que tiró su bolsa de golf al lago y se fue a su carro. Los que estaban viendo pensaron que él cambió de idea cuando regresó al lago y se metió al agua. Él tomó la bolsa, buscó en los bolsillos hasta encontrar las llaves de su carro, volvió a su carro sin la bolsa, y se fue.



Ultimas Palabras

Edith Louisa Cavell (1865-1915), fue una enfermera británica martirizada por los alemanes por esconder a refugiados británicos. A punto de morir, ella dijo:

“Parada como estoy, en vista de Dios y la eternidad…me doy cuenta que el patriotismo no es suficiente. No debo tener odio o amargura hacia ninguna persona.”



Versículo para Memorizar

Todo aquel que aborrece a su hermano es homicida; y sabéis que ningún homicida tiene vida eterna permanente en él.
1 Juan 3:15

domingo, octubre 26, 2008

Lección 9

Los Diez
Mandamientos

Parte 4



“!Cuántos observan el cumpleaños de Cristo! Que pocos, sus preceptos! O! es mas fácil cumplir con días festivos que con mandamientos.”
Benjamín Franklin

Comentario: El Quinto Mandamiento tiene que ver con el honrar tu padre y madre. Como adolescente, yo era culpable de romper este Mandamiento a diario.



Preguntas y Objeciones

“Dios no es justo en que Hitler y una tierna viejita (la cual nunca acepto a Jesús) irán al infierno.”

Pecadores frecuentemente acusan a Dios de ser injusto, porque ellos asumen que todos recibirán el mismo castigo en el infierno no importando si sus pecados son mínimos o malísimos. El juicio de Dios, sin embargo, será de acuerdo a la justicia (hechos 17:31). En Mateo 11:24, Jesús dice, “será mas tolerable el castigo para la tierra de Sodoma, que para ti.” Y en Lucas 10:14, vemos que las ciudades más pecaminosas de Corazón y Betsaida van a recibir un castigo más áspero que Tiro y Sidon. Estos versículos enseñan que habrá grados de castigo. (Ver también Lucas 12:47, 48; Hebreos 10:29.)


En esta lección veremos al Quinto Mandamiento:“honra a tu padre y a tu madre, para que tus días se alarguen en la tierra que Jehová tu Dios te da” (Éxodos 20:12).

Este Mandamiento es único, porque es el “primer mandamiento con promesa” (Efesios 6:2). Honrar a nuestros padres es estimarles, demostrarles respeto, y obedeciéndoles. El Nuevo Testamento instruye a los niños a “obedeced en el Señor a vuestros padres, porque esto es justo” (Efesios 6:1) y “obedeced a vuestros padres en todo, porque esto agrada al Señor” (Colosenses 3:20). ¿Acaso los hijos deben obedecer solamente las cosas que quieren, o que suena razonable a ellos? No, para agradar a Dios, ellos deben obedecer “en todo.” Eso no quiere decir que sus padres siempre tomen sabias decisiones o que traten a sus hijos como deben, pero ellos (los padres) tendrán que dar cuentas a Dios por sus acciones. No importando las habilidades de los padres de ser padres, los hijos deben obedecer – eso es su parte por la cual Dios les llamara a cuentas.

¿Por qué es esto tan importante? Como los hijos son naturalmente pecadores, ellos necesitan ser instruidos en los caminos del Señor; padres deben “Instruir al niño en su camino” (Proverbios 22:6). Proverbios 29:15,17 advierte, “la vara y la corrección dan sabiduría…corrige a tu hijo, y te dará descanso, y dará alegría a tu alma.” Uno que no se somete a la autoridad de sus padres, quienes son agentes de Dios para entrenarle y disciplinarle, no es probable que se someta a la autoridad de Dios y a Sus Leyes.

En esencia, este mandamiento promete que, si los hijos no honran a sus padres, todo no ira bien con ellos, y sus días no serán largos en la tierra. Esta es la razón por la cual no todo esta bien con esta generación. Ha sido dejada en la obscuridad acerca de los requisitos de la Ley y esta sufriendo las consecuencias de su transgresión. Esta plagiada con adicción a las drogas y el alcohol, promiscuidad, enfermedades transmitidas sexualmente, familias rotas, y una taza masiva de suicidios (ve a www.1000deaths.com, escoge una foto, y llora).

La Biblia dice que el Mesías magnificaría la Ley y la hará honorable (Isaías 42:21). Jesús hizo esto muchas veces, particularmente en el Sermón del Monte. Marcos 7:5-13 nos dice que los Fariseos habían deshonrado la Ley solamente dándole a Dios servicio de labios. Ellos anularon este Mandamiento por su tradición, enseñando como doctrina los mandamientos de hombres. El Salvador trajo honor de nuevo a la Ley al enseñar que la Ley era de naturaleza espiritual, y que su observancia externa no era suficiente. Dios requería verdad en lo mas intimo (los pensamientos, intenciones, y motivaciones).

Otra vez, el uso legitimo de la Ley es el enseñarnos cuan lejos hemos caído del estandarte perfecto de Dios. La Ley trae el conocimiento de pecado. Los mejores de nosotros no hemos honrado a nuestros padres como debemos. Sin embargo, al evangelizar, vas a encontrarte con algunos que contenderán que ellos han mantenido este Mandamiento y perfectamente han honrado a sus padres; ellos, por lo tanto, necesitan ser confrontados con los pecados de la carne primero antes de ser confrontados con este Mandamiento. ¿Han pecado? ¿Han robado? Casi todos admitirán que han mentido y robado; entonces, han deshonrado el nombre de sus padres al ser ladrones mentirosos.



Preguntas

1. Qué quiere decir el “honrar” a tu madre y padre?



2. ¿Debe una persona siempre honrar a su madre, aun si, por ejemplo, ella es una prostituta?



3. ¿Por qué es importante que los hijos siempre obedezcan este Mandamiento?



4. Cuando testificamos, ¿porque es importante ir por los Mandamientos que tratan con los pecados de la carne antes de mencionar este?



Progreso del Predicador

Señorita Malinformada: “No creo que la Biblia puede ser confiada porque hay tantas versiones. ¿Cual es la correcta?
Cristiano: “Hay versiones en Chino para los Chinos. Hay versiones en ruso para la gente Rusa. Hay miles de versiones de la Biblia – algunas están en lenguajes modernos, otras en lenguajes extranjeros, y algunas están en el Ingles antiguo. Pocos en la edad de la imprenta, pueden decir que no tienen acceso a las Escrituras en su propio lenguaje.”
Señorita Malinformada: “La Biblia esta abierta a interpretación. Quiero decir que, tantas personas piensan que un versículo dice una cosa y otros piensan que quiere decir otra cosa completamente diferente. Es totalmente confuso.”
Cristiano: “Trata de descifrar esto: Jesús dijo, ‘Sino te arrepientes, perecerás.’”
Señorita Malinformada: “Um..”
Cristiano: “¿Cómo interpretarías eso?”
Señorita Malinformada: “¿Acaso la Biblia no ha cambiado a través de las edades?”
Cristiano: “No lo ha hecho. Dios ha preservado Su Palabra. Cualquier persona puede ahora obtener programas computarizados que dan las palabras originales en hebreo y griego, y los únicos “cambios” son los que han sido hechos para claridad. Toma por ejemplo el verso que acabamos de ver. El Ingles antiguo dice, ‘Excepto vosotros se arrepientan, vosotros todos también igualmente perecerán,’ mientras que una versión contemporánea diriá algo como, ‘Sino te arrepientes, tu también perecerás.’”
Señorita Malinformada: “Okay, estoy entendiendo el mensaje.”



Plumas para Flechas

Allá en el Viejo Oeste, un numero de hombres estaban arriba en una casa de hospedaje entreteniéndose con un juego de cartas cuando escucharon un clamor de la calle abajo: “Fuego, fuego!” Los hombres se vieron los unos a los otros en incredulidad. Una de las ventanas se puso anaranjada con las llamas. “Esperen!” dijo el líder. “Terminemos solamente esta mano; tenemos suficiente tiempo – tengo una llave para la puerta de atrás.” Los hombres aprobaron, y rápidamente recogieron las cartas que se les habían dado. Preciosos minutos pasaron. Uno de los hombres se puso nervioso cuando las llamas encendieron la ahora rota ventana. Con ojos abiertos el su cien sudada, pidió la llave. “Cobarde!” le dijo el líder al tirarle la llave. Cada uno corrió a la puerta y esperaban con su respiración agitada mientras la llave era puesta en la chapa. “No gira!” el hombre clamo. “Dámela a mi!” dijo el líder. Mientras el trataba en vano girar la llave, el susurro en horror, “es la llave equivocada!”



Palabras de Confort

Tengo una habilidad extraordinaria de quedarme trabado en lugares. Cuando era un niño pequeño, me quede trabado en una peña muy alta y alguien tuvo que rescatarme. Cuando estaba en mis treintas me mantuve lejos de peñas, pero aun pude trabarme. Me olvide de tomar la llave para usar un baño que era usado por varios negocios. Afortunadamente, la puerta no estaba aldabada. Sin embargo, descubrí que no podía salir sin una llave. Tuve que sacar mi cabeza por un agujero pequeño y humildemente pedir a una persona que estaba pasando que vaya a una tienda y pida la llave para que yo pueda salir.


Ultimas Palabras

St. Francis de Assisi (1182-1226), fundador de la orden de mojes Franciscanos:

“Adiós, mis hijos; manténganse siempre en el temor del Señor. Que la tentación y tribulación que vendrá esta en mano ahora y felices serán aquellos que permanezcan en el bien en el cual han comenzado. Yo me apuro para ir al Señor, a cuya gracia les recomiendo.”



Versículo para Memorizar

Apártate del mal, y haz el bien; Busca la paz, y síguela. Los ojos de Jehová están sobre los justos, Y atentos sus oídos al clamor de ellos.
Salmos 34:14-15

viernes, octubre 24, 2008

Pensar un Momento


Estamos viviendo en tiempos muy difíciles. Estamos viviendo en tiempos que nunca jamás en la historia del mundo se han visto. Todos los días se habla de la economía y del futuro que se ve oscuro. Se habla de la bolsa de valores que aun no para de caer. Este problema no es solo en los Estados Unidos pero todas las economías mundiales están en peligro de poder caer en una depresión. Varios bancos han caído y aun unos países se han ido a la bancarrota.


Lo que se pensaba imposible ha pasado pero será que esto es algo mucho mas de lo que se ve? Será que esto es planeado por los élite? La verdad es que no importa. Pase como pase la Biblia ha dicho y profetizado muchas cosas. Lo que pasa ahora simplemente es una situación que permitirá que ciertas leyes y poderes sean permitidos a los gobiernos.


Poco por poco vemos que el mundo se acerca a un sistema global. El Amero, que será el será la moneda del Norte América, se introducirá pronto y de ahí las naciones Asiáticas se unirán. Al estar la unión Europa, Americana y Asiática se hará mas fácil unir las tres para hacer un mundo global.


Lean el libro del Apocalipsis, estamos en el tiempo de la ultima iglesia, para entender más. Mateo, Daniel, Pedro y otros libros más de la Biblia hablan sobre esta temporada en cual nosotros estamos viviendo, y el futuro, también. Prepárense. El día de DIOS se acerca. Adonde pasaras tu eternidad? Verifica que estés bien con DIOS. Nadie es prometido otro día mas!

sábado, octubre 18, 2008

Lección 8

Los Diez
Mandamientos

Parte 4



“Yo no soy un predicador del viejo Sábado legal. Soy un predicador del evangelio. El Sábado del Judío es para él una obligación, el Día del Señor para el cristiano, el primer día de la semana, es para él un gozo, un día de descanso, de paz, y de acción de gracias. Y si ustedes, hombres cristianos, pueden esmeradamente ahuyentar todas las distracciones, para que verdaderamente puedan descansar hoy, será bueno para sus cuerpos, para sus almas, bueno mentalmente, bueno espiritualmente, bueno temporalmente, y bueno eternamente.”
Charles Spurgeon

Comentario: Aunque el cristiano no está requerido a guardar el Sábado, el Mandamiento sí revela nuestra naturaleza egoísta. ¿Cuántas veces hemos deseado que la semana tenga ocho días para perseguir nuestra agenda, y rara vez separamos un día para Dios?



Preguntas y Objeciones

“Yo creo que iré al cielo porque vivo por la Regla de Oro.”

Gran parte del mundo conoce la Regla de Oro simplemente como “trata a otros como quieres que te traten a ti” (ver Lucas 6:31). De acuerdo a este versículo, si podemos vivir por esta regla y amamos a nuestro prójimo como nos amamos a nosotros mismos, cumplimos la Ley. Pregunta a aquellos que dicen hacer esto si ellos alguna vez han mentido, robado, odiado, o mirado con lascivia. Si ellos han roto alguno de estos Mandamientos, entonces ellos no han amado a aquellos a quienes ellos han mentido, o robado, etc. Esto les enseñará que han quebrantado la Regla de Oro. Ellos están bajo la ira de Dios (Juan 3:36), desesperadamente necesitando la sangre limpiadora del Salvador.


En esta lección veremos al Cuarto Mandamiento: “Acuérdate del sábado para santificarlo.”(Éxodos 20:8).

Algunos hoy en día insisten que los cristianos deben mantener el día de reposo, y que aquellos que adoran en el primer día de la semana (Domingo) están en gran error. Ellos piensan que el domingo (Sun-day en ingles) se origina de la adoración pagana al dios Sol, que Jesús y Pablo mantuvieron el sábado como ejemplo para nosotros, y que la Iglesia Católica Romana es responsable por el cambio del día de adoración. Aquellos que continúan adorando en el Domingo, ellos creen, recibirán la marca de la bestia. Veamos brevemente (quité la palabra A) estos argumentos.

Primero, en ningún lugar en el Cuarto Mandamiento se dice que debemos adorar en el sábado. Manda a descansar: “Acuérdate del sábado para santificarlo. Seis días trabajarás, y harás toda tu obra: Pero el séptimo día es de reposo para Jehová, tu Dios, no hagas en él obra alguna…porque en seis días hizo Jehová tu Dios los cielos y la tierra, el mar y todas las cosas que en ellos hay, y reposó en el séptimo día; por tanto, Jehová bendijo el sábado y lo santifico” (Éxodo 20:8-11).
Los que guardan el sábado adoran en el sábado. Sin embargo, la palabra “Sábado” (Satur-day – en ingles) viene del Latín “día de Saturno,” un día pagano de adoración al planeta Saturno (astrología).

Si la salvación de un cristiano depende en cómo mantiene cierto día, seguramente Dios nos hubiese dicho. En un momento, los apóstoles se reunieron específicamente para discutir la relación entre creyentes y la Ley de Moisés. Hechos 15:5-11,24-29 fue la oportunidad de Dios para hacer conocer claramente Su voluntad a Sus hijos. Todo lo que tenía que hacer para salvar a millones de la condenación era decir, “Acuérdate del sábado para santificarlo,’ y millones de cristianos Cristo céntricos, amantes de Dios, creyentes en la Biblia lo hubieran guardado felizmente. En cambio, el único mandamiento dado por los apóstoles fue de “abstenerse de lo sacrificado a los ídolos, de sangre, (quite la palabra Y) de ahogado, y de fornicación.”
No hay ni siquiera una orden en el Nuevo Testamento para que los cristianos guarden el sábado. Al contrario, se nos dice que no permitamos que otros nos juzguen en cuanto a días de reposo (Colosenses 2:16), y que el hombre no fue hecho para el sábado, sino que el sábado fue hecho para el hombre (Marcos 2:27). El sábado fue dado como una señal para Israel (Éxodo 31:13-17); en ningún lugar es dado como una señal para la Iglesia. Miles de años después que el Mandamiento fue dado, aún podemos ver la señal que separa a Israel del mundo – ellos aún santifican el sábado.

Los apóstoles se reunían en el primer día de la semana para partir pan (Hechos 20:7). La ofrenda fue tomada en el primer día de la semana (1 Corintios 16:2). ¿Cuándo se reúnen para partir pan y para reunir la ofrenda los que guardan el sábado? No en el mismo día que la Iglesia primitiva. Ellos nos dicen que la Iglesia Católica Romana cambió su día de adoración del sábado al domingo, ¿pero qué tiene que ver eso con que los discípulos se hayan reunido el primer día de la semana? Eso fue la Iglesia Católica Romana en los primeros siglos, pero no la Iglesia en el Libro de los Hechos.

Romanos 14:5-10 nos dice que un hombre considera un día mayor que otro; otro considera a todos igual. Después las Escrituras nos dice que todos deben estar totalmente persuadidos en sus propias mentes. No debemos de juzgarnos los unos a los otros en cuanto al día en que adoramos.

Jesús sí guardo el sábado. Él tenía que guardar toda la Ley para ser el sacrificio perfecto. La Biblia dice muy claro que la Ley ha sido satisfecha en Cristo. La razón por la cual Pablo iba a la sinagoga todos los sábados no era para cumplir la Ley; eso hubiera sido contradictorio a todo lo que él enseñó acerca de ser salvos solamente por gracia (Efesios 2:8,9). En cambio, lo hizo para poder predicarles el evangelio a los judíos, como es evidente en el Libro de los Hechos. Pablo tenía un celo evangelístico increíble para que Israel sea salvo (Romanos 10:1). Para el judío, él se hizo un judío, para ganar a los judíos (1 Corintios 9:19, 20). Eso quiere decir que él iba a donde se reunían en el día que se reunían –“el razonaba en las sinagogas todos los sábados” (Hechos 18:4). D. L. Moody dijo, “La Ley solamente puede perseguir a un hombre hasta el Calvario, no mas allá.” Cristo nos redimió de la maldición de la Ley para que no estemos sujetos a ella ya más. Si queremos cumplir con una parte de la Ley (aunque sea por amor a Dios), estamos obligados a cumplir toda la Ley (Gálatas 3:10) – todos los 613 preceptos. Si aquellos que insisten en cumplir el sábado fueran tan celosos acerca de la salvación de los perdidos como lo son para que otros cristianos guarden el sábado, veríamos avivamiento.



Preguntas

1. ¿Qué dice la Biblia que debemos hacer el sábado?



2. De acuerdo a Éxodo 31, ¿Para quién fue dado el sábado?



3. ¿Adoró Pablo el sábado? ¿Por qué si o por qué no?



4. ¿Por qué es el cristiano libre de la Ley?






Progreso del Predicador

Cas Poso: “¡Yo pienso que los cristianos son unos escamosos!”
Cristiano: “¿Por qué?”
Cas Poso: “Son personas mentalmente débiles que necesitan muletas en la vida.”
Cristiano: “Tienes razón, si tú defines a un paracaídas como una ‘muleta’ para cuando alguien salta de un avión.”
Cas Poso: “Eh?”
Cristiano: “¿No te das cuenta que un día vas a tener que pasar por la muerte? Es allí cuando necesitarás un Salvador, o la ‘muleta’ que tú dijiste. Cuando mueras tendrás que enfrentar una Ley Moral que es mucho mas áspera que la Ley de la gravedad.”
Cas Poso: “Yo no creo en la ‘Ley’.”
Cristiano: “Eso no importa. Si un hombre salta de un edificio de diez pisos no creyendo en la ley de la gravedad, él aún tiene que enfrentar las consecuencias de su acción, aunque no crea en ella. ¿Has cumplido la Ley de Dios, los Diez Mandamientos? ¿Alguna vez has mentido?”
Cas Poso: “Me estas comenzando a enojar.”
Cristiano: “Sólo te estoy diciendo esto porque me importas. Dios va a juzgar con una peinilla muy fina en el Día del Juicio. Él va a juzgar hasta los pensamientos y las intenciones de tu corazón. La Biblia dice en Salmos 68:21 que ‘Dios herirá la cabeza de sus enemigos, la testa cabelluda del que camina en sus pecados.’ Tienes que arrepentirte hoy y poner tu fe en Jesucristo. “



Plumas para flechas

En 1969, veinticuatro personas decidieron ignorar las advertencias de que el Huracán Carmille se estaba dirigiendo a Mississippi. Ellos, en cambio, (quité la palabra SE) decidieron que lo iban a aguantar. Veintitrés de ellos murieron en el Huracán. La cruz es una advertencia del feroz huracán de la ira de Dios, que nadie “aguantará” en el Día del Juicio. La única forma de escapar la ira venidera es “besar al Hijo” – es ceder al Señorío del Salvador, Jesucristo. Aquellos que ponen su confianza en Él son bendecidos con el perdón y la vida eterna.



Palabras de Confort

Sentí un terremoto la otra noche. Me maravillo de la sensibilidad que el cuerpo tiene para detectar no solamente el momento en que un terremoto comienza sino también el tamaño del mismo. Vivir en California me ha dado tal agudeza al punto que puedo acertar exactamente el tamaño del terremoto (dentro de un par de puntos). El que sentí debe haber sido por lo menos de 5.5. Fue los suficientemente fuerte como para despertarme de mi sueño profundo y decirle a Sue, “¡Wow! Ese fue uno grande…” Ella ya había estado despierta y dijo que (quité la palabra ELLA) no lo había sentido. Que raro. Ella también dijo que se acababa de virar en la cama.



Ultimas Palabras

Ludwig van Beethoven (1770-1827), Compositor Alemán:

“¡ Que pena! ¡Que pena! ¡Es demasiado tarde!”



Versículo para Memorizar

Uno hace diferencia entre día y día; otro juzga iguales todos los días. Cada uno esté plenamente convencido en su propia mente. El que hace caso del día, lo hace para el Señor; y el que no hace caso del día, para el Señor no lo hace. El que come, para el Señor come, porque da gracias a Dios; y el que no come, para el Señor no come, y da gracias a Dios.
Romanos 14:5-6

domingo, septiembre 28, 2008

Hebreos 4:9

La Chequera del Banco de la Fe.

"Por tanto, queda un reposo para el pueblo de Dios." Hebreos 4:9.

Dios ha provisto un reposo, y algunos han de entrar en él. Aquellos a quienes fue predicado inicialmente, no entraron por su incredulidad; por tanto, ese reposo queda para el pueblo de Dios. David cantó acerca de él; pero tenía que tocar el tono menor pues Israel rehusó el reposo de Dios. Josué no podía proporcionarlo, ni Canaán podía concederlo: queda para los creyentes.

Vamos, entonces, esforcémonos por entrar a este reposo. Renunciemos al arduo trabajo del pecado y del yo. Abandonemos toda confianza incluso en aquellas obras de las que pudiera decirse: "son buenas en gran manera." ¿Poseemos algunas de ellas? A pesar de ello, descansemos de nuestras propias obras, lo mismo que hizo Dios de las Suyas. Encontremos ahora solaz en la obra consumada de nuestro Señor Jesús. Todo ha sido cumplido plenamente: la justicia no requiere más. Paz grandiosa es nuestra porción en Cristo Jesús.

En cuanto a los asuntos providenciales, la obra de gracia en el alma, y la obra del Señor en las almas de otros, pongamos estas cargas sobre el Señor, y descansemos en Él. Cuando el Señor nos da un yugo que llevar, lo hace de tal manera que al asumirlo, encontremos descanso. Por fe nos esforzamos para entrar al reposo de Dios, y renunciamos a todo reposo en la autosatisfacción o la indolencia. El propio Jesús es el perfecto reposo, y en Él estamos llenos hasta el borde.

sábado, septiembre 27, 2008

Salmo 18: 28.

La Chequera del Banco de la Fe.

"Tú encenderás mi lámpara." Salmo 18:28.

Pudiera ser que mi alma esté retenida en la oscuridad; y si esta oscuridad es de una naturaleza espiritual, ningún poder humano podría brindarme luz. ¡Bendito sea Dios!, porque Él puede alumbrar mi oscuridad, y encender mi lámpara de inmediato. Aunque esté rodeado de "tinieblas que cualquiera las palpe," sin embargo, Él puede disipar la lobreguez, y traer de inmediato resplandor a mi alrededor.

La misericordia consiste en que si Él enciende la lámpara, nadie la puede apagar, ni se extinguirá por falta de sustancia, ni se consumirá en el lapso de unas horas. Las lumbreras que el Señor encendió al principio siguen alumbrando todavía. Las lámparas podrían necesitar despabiladeras, pero Él no las apaga.

Que me sea concedido, entonces, como el ruiseñor, cantar en la oscuridad. La expectación me proveerá de música, y la esperanza me dará el tono. Pronto me regocijaré en una lámpara encendida por Dios. Estoy débil y fatigado ahora. Tal vez sea el clima, o la debilidad corporal, o la sorpresa de una súbita prueba; pero independientemente de la causa de la oscuridad, únicamente Dios me proporcionará luz. Mis ojos sólo son para Él. Pronto tendré la lámpara del Señor que alumbre a mi alrededor; y, más adelante, a su debido tiempo, estaré donde no se necesitan lámparas, ni luz del sol tampoco. ¡Aleluya!

miércoles, septiembre 24, 2008

Ezequiel 47:9.

La Chequera del Banco de la Fe.

"Y toda alma viviente que nadare por dondequiera entraren estos dos ríos, vivirá." Ezequiel 47:9.

Las aguas vivas, en la visión del profeta, fluían al Mar Muerto, y eran portadoras de vida, incluso para ese lago estancado. Allí donde llega la gracia, la vida espiritual es la consecuencia inmediata y eterna. La gracia procede soberanamente de conformidad a la voluntad de Dios, tal como el río en todos sus serpenteos sigue su propia y dulce voluntad; y a todas partes donde llega, no espera que la vida venga a él, sino que produce vida mediante su propio flujo vivificador. ¡Oh, que se derramara a lo largo de nuestras calles, e inundara nuestros barrios bajos! ¡Oh, que viniera ahora a mi casa, y se elevara de tal forma que cada habitación tuviera que nadar en él! Señor, concédeme que el agua viva fluya a mi familia y a mis amigos, y que no me pase por alto. Espero haber bebido ya de sus aguas; pero deseo bañarme en él, sí, nadar en él. Oh mi Salvador, necesito vida más abundantemente. Ven a mí, te lo ruego, hasta que cada parte de mi naturaleza esté vívidamente energizada e intensamente activa. Dios vivo, te lo ruego, lléname de Tu propia vida.

Yo soy un pobre palo seco; ven y hazme vivir de tal manera que, como la vara de Aarón, pueda reverdecer y florecer y producir fruto para Tu gloria. Vivifícame, por nuestro Señor Jesús. Amén.